Un maní, un trocito, un mini-pene es menos de 15. Antes de suspirar aliviados, vayan a medirse y asegúrense que no sean parte de esta conflictiva población. Entre 15 y 17 está muy bien y a partir de 18 podríamos estar hablando de un trozo importante.
El ancho, claro, también tienen que ver. Es mejor chiquita y gorda que larga y
finita. Esta última nos traerá recuerdos de las ecografías transvaginales o de cuando tomábamos licuado con pajita, depende la situación.
Para dejar este tema más claro, algunos ejemplos:

Un pitito bebé

Un termo (Gracias, Walter.)